Ian Moche el niño de diez años que revolucionó la manera de hablar sobre el autismo. No hay nada más inspirador que los testimonios realizados en primera persona. Él es un niño de diez años diagnosticado con TEA que, ayudado por su madre, ha cruzado las barreras de su vida doméstica para contarle a todo el mundo qué es el autismo y de qué se trata a grandes rasgos. Con sus apenas diez años y con los desafíos que el ser autista le puede acercar y Ian Moche muestra también la otra cara, más poética, del autismo y la neurodiversidad.
Llega a los medios de todo tipo, redes sociales, radio, televisión, programas, etc….con su inocencia y su determinación para decir soy Ian Moche y soy Autista. Abanderado de “su manada” y con esfuerzo, pero convicción se ha dedicado en el último tiempo a explicar qué es el autismo y qué no. Derribar mitos, tejer redes con otros activistas como Sunny o Elefante Violeta, informar y alentar.
En una época de tanta sobre información, pero muchos mitos y falacias, no hay nada más alentador que verlo en sus videos. Ian Moche se muestra como es, con desafíos, con su encanto y su frescura. No dice que ser autista no es color de rosas, pero muestra la singularidad y la belleza de ser y animarse a ser único.
Un mensaje alentador que viene de la mano de un niño empoderado. El impacto de su testimonio y de su llegada a los medios de comunicación fue tal que ha participado en todo tipo de programas. Se ha sentado junto a la conductora Georgina Barbarrosa, el actor Gastón Pauls y el periodista Diego Luco.
Comunidad de influencers:
Ian Moche, Sunny, Elefante Violeta, Neuro mágica, son algunos de los nombres que se escuchan en argentina. Nombres de “autivistas” como les gusta llamarse. Claramente Ian Moche es el referente más pequeño de todos ellos.
Ian Moche en Instagram:
Todo comenzó con una cuenta que maneja con la ayuda de su mamá. Empezó de a poco, contando sus días, su vida cotidiana, sus intereses de niño. De a poco fue convirtiéndose en un comunicador nato, sobre los que es ser Autista. Ian Moche brinda información útil, desde juguetes recursos terapéuticos, hamacas y fidgets, actividades, eventos, etc… Participa en campañas, en medios periodísticos e incluso ha llegado a citarse con el presidente el día 2 de abril, día de concientización sobre el autismo. Su cuenta hoy tiene 238 mil seguidores y su labor no cesa, su frescura tampoco.
El aporte de Ian Moche es valiosísimo, aunque en realidad su nombre es Guido Lescano, a él le gusta presentarse como Ian Moche. Su forma de comunicar y de mostrar su día a día, permiten hacer comprender los desafíos que tienen las personas neurodivergentes. Su impacto hace que diputados y legisladores, cono quienes ha tenido encuentros, se encuentren receptivos a su testimonio y propuestas. Empoderado por una familia y una madre que lo acompaña conmueve cuando dice “Mi mama dice que yo voy a cambiar el mundo”. No hay dudas de que su aporte esta moviendo mucho las aguas, y ojalá que en esas olas vengan cambios positivos para la comunidad autista.
Visibilidad, respeto, educación, sostén, redes, leyes, etc… Se pueden hacer muchas cosas, pero hace falta más información y gente que empuje.
Las redes sociales permiten a personas como Ian Mon Moche y otros más comunicarse, unirse y organizarse de manera activa en pos de una causa común: la concientización sobre el autismo. Claramente Ian Moche es el activista del autismo más pequeño de todos pero no por eso el menos influyente.